TEORIA - Fundamentos: Por qué apostar al juego, literatura y creatividad?

El arte y el juego tienen capacidad elaborativa y creativa. La infancia y adolescencia son periodos privilegiados para expresar y trabajar más aun cuando estamos con niños y adolescentes vulnerados por condiciones sociales, familiares o biológicas que en cualquier caso afecta su subjetividad, su familia, su mundo. Proponer esta lógica del juego, del arte y la cultura es ofrecer caminos de acceso a la cultura, al mundo simbólico, por donde pueda drenar la angustia, los duelos, los dolores psíquicos, las esperanzas, la vida.

Salud es un proceso bio – psico – social y cultural variable, dinámico y en constante tensión con otros aspectos económicos, sociales y políticos. Nuestra esencia como seres humanos porta la complejidad de la historia llena de costumbres, cosmovisiones, emociones y sentimientos, que puede ser revivida o reflexionada desde las diferentes manifestaciones del arte y del juego. Tomar lo cultural, el juego y el arte como forma de trabajo subjetivo en la clínica hospitalaria, reconociendo su capacidad elaborativa y creativa, es aún un hoy un objetivo de conquista.

Es por eso que cualquier trabajador de la salud puede y debe apostar a estos espacios culturales en los espacios hospitalarios, centros de salud o institución en la que este. Lo que la Ley nacional de Salud mental[1] llama Dispositivos alternativos es proponer esta lógica de los derechos culturales, o el derecho a la metáfora como plantea Petit. “No leemos solamente para dominar la información… sino para inventar un sentido a la vida” (Petit 2001:146). Esta es la propuesta del juego, del arte y la cultura, es ofrecer caminos de acceso a la cultura, al mundo simbólico, por donde pueda drenar la angustia, los duelos, los dolores psíquicos, las esperanzas, la vida. “…porque en el fondo todo es lo mismo: el viaje, el amor, la lectura: una misma aventura donde nuestro paisaje interior se transforma…”[2] (Petit: 2001: 8)

Desde lo teórico como también desde la práctica clínica, salud y cultura siempre están relacionadas íntimamente. Estamos construidos como sujetos desde una propuesta cultural determinada en su historia y posibilidades. De allí que cultura genera un abanico de posibilidades de salud. Salud es un proceso cultural y social variable, dinámico y en constante tensión con otros aspectos económicos, sociales, políticos, etc. Nuestra esencia como seres humanos porta la complejidad de la historia llena de costumbres, cosmovisiones, emociones y sentimientos, que puede ser revivida o reflexionada desde las diferentes manifestaciones del arte y del juego. Como psicoanalistas poder tomar lo cultural, el juego y el arte como forma de trabajo subjetivo para la recuperación del niño y su familia.

Este fragmento es parte de un trabajo que fue presentado en el VII Simposio Internacional sobre Infancia e Instituciones bajo el lema "Sujetos e instituciones: territorios, fronteras y exilios" -VII SIMPINFA INFEIES- agosto, septiembre y octubre 2020 como TRABAJO LIBRE.



[1] LNSMYA 26657 junto a la amplia normativa de infancia – Ley 26061 y todo el conjunto de leyes 26.000 ya que implican la diversidad institucional por la que transita la infancia. Así también como la normativa internacional de la Convención de los derechos del niño, del paciente hospitalizado y de los derechos humanos.

[2] PETIT M (2001) Lecturas: del espacio íntimo al espacio público. Ed. Fondo de cultura económica. Bs. As.